«BAJO EL CIELO DE VILLA MONTES SE ECLIPSARÁN PARA SIEMPRE
LAS GLORIAS DE ESTIGARRIBIA, Y RENACERÁ LA FE EN LA VICTORIA DE LAS ARMAS
BOLIVIANAS»
(Mcal. Bernardino Bilbao Rioja).
GUERRA DEL CHACO — BATALLA DE VILLA MONTES, FEBRERO 1935
[...] Bilbao Rioja, al asumir la enorme responsabilidad, no se sintió inferior
a la ardua tarea, ni tampoco se puso esquivo a coquetear con la gloria, pues es
deber imperioso de todo buen soldado el rendirla y hacerla suya. Tenía
confianza en si mismo, que era lo principal y tenía también fe muy grande en
esa masa anónima, sufriente, desgastada y escéptica poco antes, y ahora que
estaba bajo sus órdenes. Poseída de un extraño galvanismo de combatir y de
vencer, al contrario de otros jefes, que cohonestaban sus errores y paliaban
sus fracasos con la que llegó a ser socorrida cantaleta, de que el soldado
indio no respondía a las exigencias de iniciativa y valor de los cometidos de
combate. Bilbao siempre enalteció este producto autóctono de la raza milenaria,
haciéndole la justicia debida y fortificándole su comprensión, su ánimo y su
fe... Esto bien lo reconocían los paraguayos, pero existían no pocos bolivianos
que lo ponían en duda[...]
No hay comentarios:
Publicar un comentario