Foto: El Diario de La Paz.
Fuente: Orígenes del poder militar: Bolivia 1879-1935 - Escrito
por James Dunkerley / Tercera edición 2006.
“No debe olvidarse que el conflicto entre Norte y Sur ya existía
antes del auge de la plata, y que La Paz fue
la ciudad más grande y centro nacional del comercio durante mucho
tiempo. Hacía 1900, La Paz tenía 60.000 habitantes, mientras que Sucre tenía
21.000. Si bien el ferrocarril llegaba únicamente hasta Oruro, su población estaba
estrechamente ligada a La Paz por las antiguas rutas del Oro y de la plata. Cochabamba,
como la provincia agrícola más rica y centro importante de poder, también orientaba
gran parte de su comercio al norte, y se decía que mantenía el equilibrio entre
La Paz y Sucre.”
“El 12 de ese mes declararon que el Estado Federal se
rebelaba y que habría guerra entre norte y sur.”
“Los federalistas enfrentaron problemas ubicuos de cara a
las rebeliones: falta de armas, de dinero en efectivo y de hombres entrenados.
Reyes Ortiz logro eventualmente la adhesión de la guarnición de 200 hombres y
se movilizo a la Guardia Nacional en las provincias locales. Los primeros
contingentes llegaron a la ciudad a fin de mes, Pero el ejército federal
constaba con solo 800 hombres y 600 rifles a principios del año siguiente. La
ciudad no poseía más de 1.000 bolivianos en su tesorería, obligando a los
subprefectos a recaudar de inmediato el tributo indígena para pagar un
contingente de 2.000 rifles que rápidamente se pidieron del Perú.”
“Por su parte Alonzo pudo reunir 3.000 hombres, consiguió 14
cañones y cuatro ametralladoras Maxim, recolecto el tributo de las provincias
del Sur e incremento el impuesto del estaño de 50 a 80 centavos por quintal
para aumentar sus finanzas…” “Llego a Oruro para el Año Nuevo, y parecía estar
en excelente posición para tomar La Paz. Dos factores alteraron la situación:
La falta de unidad dentro del cuerpo de oficiales del ejército
constitucionalista. Pastor Baldivieso relata cómo, en una reunión de oficiales
de alto rango en Oruro, se alegaba que el 60% de las tropas eran de paceños y que
sería imposible atacar La Paz. Se respondía que Melgarejo había atacado Potosí
y Frías Cochabamba con tropas locales…”
“Empero, gran parte de los oficiales paceños, todos los
suboficiales del Batallón 1º. Y gran parte de los soldados del Escuadrón Bolívar
fueron destituidos; abandonaron el campamento cantando himnos paceños… Por
estos abandonos, el ejército se redujo quizás a una tercera parte…”
Entre tanto“Federico Zuazo llamo a la población de La Paz a reunirse
para defender la ciudad de las fuerzas gubernamentales que se acercaban. Pando
pudo lograr una considerable movilización del campesinado del norte, gracias a que
distribuyo coca, les prometió devolverles sus tierras y les hablo de la amenaza
de una campaña de terror renovada por parte de los aloncistas…”
"..Cuando el ejercito constitucionalista llego a las afueras de
La Paz el 8 de enero, lo recibieron unos 5.000 campesinos en posiciones defensivas
y armados con hachas y cuchillos. Aunque los campesinos solo contaban con una
docena de rifles más o menos, impactaron bastante a las tropas del gobierno..."
“..el 21 de enero de 1899, el escuadrón Sucre del ejército
de Alonso compuesto por jóvenes liberales de la capital, llego al pueblo de
Corocoro luego de una campaña de retirada, donde una fuerza indígena de Pacajes
los persiguió a kilómetro y medio de distancia de su base en Viacha. Durante la
noche los indígenas reunidos en las colinas de los alrededores de Corocoro
crecieron notablemente, pues se unieron a ellos mineros y trabajadores del
pueblo, al día siguiente atacaron con palos y piedras a las tropas, pero
retrocedieron ante un intenso fuego de rifles. Las demandas de provisiones y
forraje que hicieran las fuerzas gubernamentales les fueron negadas por los
pobladores. Un nuevo ataque por parte de los campesinos se dio, al que se unió
la gente del pueblo utilizando dinamita para atacar a los soldados, pero este también
fue contenido. La dinamita provenía de la compañía minera de Corocoro que había aceptado proporcionarla a las
fuerzas del gobierno; empero, una semana antes aparecieron avisos amenazando
con destruir todas las instalaciones, tanto en las puertas de la iglesia como
en aquellas de la oficina del gerente. La marcha de las tropas y el refuerzo
enviado tres días después del primer ataque, hizo posible que
los campesinos copen el pueblo, sin importarles cual era la afiliación política
de la mayoría de sus habitantes. Los “blancos” se refugiaron en la iglesia y
los jefes de mina se escondieron en los socavones, pero varios ingenieros
escandinavos que intentaron evadirse resultaron muertos…”
Es evidente que los lideres federales tuvieron que apoyar
los actos de su ejército sustituto, pero estaban perfectamente conscientes del
peligro que suponía romper el tabú de levantar a los campesinos. Con todo,
Pando intento lograr la dirección de este enorme movimiento y lo organizo con líderes
sobre los que ejercía cierta autoridad.
Pablo Zarate un cacique indígena de Machacamarca, pueblo
ubicado en el centro de la zona conflictiva adopto el título aymara tradicional
de Willka y pronto gano influencia. Conservaba el título de General del Ejército
Federal, y el Comandante del Ejército Indígena, aunque no se sabe con certeza
si le fueron otorgados o si se los autoconfirió. En su capacidad de General de División
y Comandante del Ejercito Indígena extendió sus actividades a Oruro y Cochabamba
con la cooperación de blancos y mestizos a quienes obligo a vestirse con traje
nativo.
En nombre de Willka sin duda se convirtió en el motivo de
esta fuerte corriente de reivindicación racial que apuntalo la campaña
campesina y se hizo manifiesta en la masacre de 130 soldados de caballería liberales
en el pueblo de Mohoza.
No hay comentarios:
Publicar un comentario