El 20 de diciembre de 1943 asumió el gobierno una junta militar presidida por
el mayor Gualberto Villarroel oficial de 35 años poco conocido, ex comandante
del Batallón Ayacucho en la Guerra del Chaco, líder del grupo “Razón de Patria”
(RADEPA), de brillante trayectoria en la Escuela de Armas de Cochabamba, y que
había tenido el mérito de oponerse, en Villamontes, al golpe de Estado militar
contra el presidente
Constitucional Daniel Salamanca, en 1943, acaecido en
plena campaña del Chaco. El gabinete que designo, en la oportunidad, estaba
conformado por una mayoría de ministros militares de RADEPA, tres ministros del
grupo “Estrella de Hierro”, y tres del MNR, entre los que destacaban Víctor Paz
Estenssoro como Ministro de Hacienda, Carlos Montenegro como Ministro de
Agricultura y Augusto Céspedes como Secretario General.
De esta forma, según apreciación de Luis Peñaloza Cordero en su Historia del
Movimiento Nacionalista Revolucionario 1941-1952 (1963) ya citaba, “por primera
vez, Bolivia tenía un gobierno que, casi en su totalidad, estaba desvinculada
de las grandes empresas mineras y cuya orientación general era de independencia
con relación a aquellas y, a diferencia del gobierno Busch, con unidad de
programa de realizaciones y criterio”.
Por su parte, en El presidente Colgado, texto terminado en 1964 mientras
desempeñaba las funciones de Embajador de Bolivia en Francia, y que refleja una
mayor preocupación del autor por la inserción de referencias documentales
puntuales, Augusto Céspedes describe a Villarroel como “hombre de mediana
estatura, rostro carnoso y lampiño”, frente alta y ancha”, de valor sereno y
nada jactancioso”, “contrajo matrimonio con Doña Elena López, que como su
compañera y viuda demostró ser uno de los más elevados ejemplares de virtud,
nobleza y dignidad que haya tenido la estirpe boliviana”.
Aunque el manifiesto inicial del gobierno de Villarroel destacaba su fe en el
orden democrático y su solidaridad con el sistema interamericano, el principal
problema que tuvo que enfrentar, inmediatamente, fue el del no reconocimiento
por parte del Departamento de Estado de los Estados Unidos y de 19 naciones
americanas, con excepción de la Argentina, reflejo local de la II Guerra
Mundial todavía en curso. En tales circunstancias el gobierno fue tildado de
“nazi” tanto por la oposición cuanto por el gobierno de los Estados Unidos.
Fuente: Bolivia, el programa del MNR y la revolución nacional: del movimiento
de reforma ... al ocaso del modelo neoliberal (1928-2002) / Eduardo Arze
Cuadros.
Foto: Gualberto Villarroel y Paz Estenssoro.
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