...El Junkers que despego de Muñoz llevándose a Kundt escoltado por dos
oficiales desapareció en la distancia del cielo chaqueño. Nadie, fuera de los
directamente involucrados sabia donde se dirigía. ¿A La Paz, a cumplir arresto?
¿A Cochabamba, donde Kundt había comprado una casa con los dineros de su
indemnización por los saqueos de 1930? Durante días se especuló, dentro y fuera
de Bolivia, acerca del destino del famoso ex jefe militar. En el extranjero le
atribuían haberse marchado a Buenos Aires; en Asunción afirmaban que había sido
desterrado. Pero el 22 de diciembre La Razón publico la primera información
parcialmente cierta: “El general Kundt se encuentra en Santa Cruz”, titulaba la
noticia, y agregaba que se encontraba en esa ciudad “en uso de una breve
licencia”, pero erraba de medio a medio al afirmar que “en breve [debía]
hacerse cargo de la presidencia de la Comisión de Asesores Militares del
Gobierno”. Error disculpable en verdad, puesto que ese había sido el pretexto
oficial del gobierno para alejarlo del mando del Ejército.
Pero sabemos que ya ni los militares ni el gobierno lo querían ni lo
necesitaban. Es más su presencia habría sido un incordio. Y en Santa Cruz
saborearía el general las primeras hieles de su caída en desgracia. El diario
de campaña de Juan Granier refiere que en anteriores estadías en esa pequeña
ciudad –pequeña en 1933- el representante de la firma alemana Zeller Mozer se
había afanado por el honor de hospedar al por entonces ilustre visitante. Pero
después de Campo Vía las cosas habían dado un giro radical. Su compatriota se
excusó de dar alojamiento a Kundt alegando el temor a una posible reacción
popular adversa, o a enemistarse con los nuevos mandos militares, pues Zeller
Mozer era proveedor de insumos al Ejercito –gracias en no poca medida a los
buenos oficios del propio Kundt. Pero business is business. El testigo cruceño
de la anécdota le dijo a Granier: “Estos gringos también tienen sus cambas
entre ellos”. Sería solo el preámbulo de una larga y personalmente dolorosa vía
crucis para el general.. (...)
Fuente: El general y sus presidentes: vida y tiempos de Hans Kundt, Ernst Röhm
y siete presidentes en la historia de Bolivia, 1911-1939. De: Robert Brockmann.
Foto: Santa Cruz. Plaza 24 de Septiembre esquina de las calles Bolívar y 24 de
Septiembre. Casa Zeller & Villinger, decada de los 20´s. ("El nombre
de la casa comercial que legaría ser Zeller & Mozer, era por entonces
Zeller & Villinger. Por esa época los matrimonios de estos alemanes, se
podrían denominar como alianzas económicas y de conveniencia. Posteriormente
esta casa se llago a denominar Zeller & Mozer, cuando la hija de Mozer se
casó con el hijo de Zeller..." Richard Voss Urquidi.)
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