EL TAM, DE SERVICIOS PARA LA GUERRA A LÍNEA AÉREA COMERCIAL

Por: Joaquín Leoni / Este artículo fue publicado en el periódico La Razón de La Paz el 16 Agosto de 2009.

Era 1945 y el mundo se adentraba en una nueva etapa política tras el fin de la Segunda Guerra Mundial. Bolivia también atravesaba por un período de posconflicto; y a pesar de que la Guerra del Chaco había terminado diez ańos atrás (1935), las lecciones dejadas por esa conflagración bélica aún se dejaban sentir en el país.

Las Fuerzas Armadas no fueron ajenas a la influencia del recuerdo de la guerra con Paraguay, y después de una evaluación de las falencias militares, los uniformados decidieron crear una unidad aérea para el traslado de personal y logística armada a los campos de batalla, si el país atravesaba por un nuevo conflicto.

Así nació el Escuadrón de Transporte Aéreo (ETA), que con el tiempo, se convertiría en el Transporte Aéreo Militar (TAM).

Los primeros aviones correspondieron a una donación de tres naves C-47, de parte del Gobierno de China, y que fueron jubiladas del conflicto mundial. Los primeros aviadores y el primer personal técnico fueron capacitados en la base de Albrok, en Panamá, cuenta el actual director comercial de la línea aérea, José Iván García Terceros.

En la década de los 70, la flota del TAM creció. Durante su primera gestión de facto, el fallecido ex presidente Hugo Banzer Suárez compró siete aeronaves holandesas Fokker.

Luego de esta adquisición, si los encargados de la línea aérea solicitaban más aviones, invariablemente, el ex general respondía: No me pidan más, ya compramos las naves Fokker.

Oficiales del TAM consideran que esto provocó que la línea aérea quedara desactualizada y sus aviones terminaran en desuso.

Aún así, los aviones cumplieron funciones, en especial de transporte de pasajeros. Por ello, como se mencionó antes, la unidad se convirtió en el TAM, ya que este grupo había dejado atrás su objetivo militar para convertirse en una unidad de atención a la sociedad civil.

El 5 de enero de 2007, esta forma de trabajo se consolidó mediante una resolución de la FAB, que permitió la adquisición de aeronaves inglesas y chinas. Todo ello, con el objetivo de que la unidad mejore su trabajo como una línea aérea de traslado de pasajeros civiles y, como consecuencia, alcance la autosostenibilidad.