Foto: Nuremberg, 1938.
Bolivia quería avanzar en su soberanía después de la Guerra
del Chaco. La presión de excombatientes, sobre todo los capitanes de la logia
Razón de Patria (Radepa) provocó la nacionalización del petróleo en 1936 y la
expulsión de la Standard Oil. Radepa tenía un discurso antiimperialista y no
ocultaba coqueteos con el nacionalsocialismo. Según se conoció después, los
servicios de inteligencia de la Embajada de Estados Unidos evaluaban
preocupados esa situación y la presencia de florecientes industrias alemanas en
Bolivia.
Radepa y los partidos nacionalistas surgidos del Chaco querían relaciones económicas soberanas. En la mira estaba el estaño, mineral estratégico para la industria armamentista. Con el estallido de la Segunda Guerra Mundial, las minas bolivianas cobraron una importancia geopolítica internacional.
Radepa y los partidos nacionalistas surgidos del Chaco querían relaciones económicas soberanas. En la mira estaba el estaño, mineral estratégico para la industria armamentista. Con el estallido de la Segunda Guerra Mundial, las minas bolivianas cobraron una importancia geopolítica internacional.
Tanto los países del Eje como los aliados ambicionaban ese
recurso. Entonces, el espionaje británico inventó el famoso "putch
nazi" colocando una supuesta carta secreta de Alemania en la valija de
Elías Belmonte, héroe del Chaco y líder de Radepa.
En 1941, durante el gobierno de Peñaranda, se fraguo el “Putch” nazi. Años más tarde se supo que todo había sido instrumentado por un agente inglés. Al redepsta Elías Belmonte –a quien Busch envió a ocupar un cargo diplomático en Alemania como agregado militar en Berlín- se le inculpo de tener simpatías por la corriente del nacional-socialismo alemán.
En 1941, durante el gobierno de Peñaranda, se fraguo el “Putch” nazi. Años más tarde se supo que todo había sido instrumentado por un agente inglés. Al redepsta Elías Belmonte –a quien Busch envió a ocupar un cargo diplomático en Alemania como agregado militar en Berlín- se le inculpo de tener simpatías por la corriente del nacional-socialismo alemán.
EL PUTCH
El 18 de julio de 1941 Douglas Jenkins secretario de la
legación de EE.UU. hizo conocer a la cancillería boliviana una carta firmada en
Berlín por el mayor Elias Belmonte agregado de la embajada boliviana en
Alemania. El destinatario era Ernest Wendler representante de la embajada
alemana en La Paz. La carta hablaba de los planes para derrocar al gobierno
boliviano e instaurar un régimen pro nazi en el país. Wendler fue expulsado
de Bolivia. Belmonte sufrió la degradación, el ostracismo y la censura de sus
conciudadanos. Los periódicos nacionalistas "La calle",
"Busch" e "Inti" fueron clausurados. Con los años se supo
que un agente inglés había fraguado la carta del "putch nazi" como
parte de la estrategia aliada para desmoronar las corrientes pro-alemanas de
América Latina. Belmonte fue rehabilitado en años posteriores.
En 1942 Bolivia rompió relaciones con Alemania y Japón. El
Presidente Peñaranda viajó a los Estados Unidos e hizo una gira por varios
países latinoamericanos, era la primera vez que un Presidente de Bolivia en
ejercicio emprendía un viaje de esa naturaleza.
LA “ROSCA MINERA”
La prensa de la "rosca" se hizo eco inmediato y
durante semanas se especuló sobre la participación de bolivianos pro nazis, la
mayoría de los cuales eran defensores de los recursos naturales. El gobierno
degradó a Belmonte, quien no pudo retornar al país hasta la confesión moribunda
del espía inglés autor de la conjura. El presidente Walter Guevara lo
desagravió a nombre de la nación.
La farsa sirvió para que Bolivia se adhiriese a una guerra
que no era suya; vendiese estaño a precios bajos formando el stock que luego
EE.UU. usó en su contra; fue la antesala de la masacre de mineros en 1942.
Fuentes:
-Lupe Cajías. Cospiracion Internacional, La Patria, 13 de
julio de 2013.
- El nacionalismo en Bolivia de la pre y posguerra del Chaco
(1910-1945). De: Irma Lorini
No hay comentarios:
Publicar un comentario