Fuente: Tarija en la Independencia del Virreinato del Río de
La Plata - Escrito por Eduardo Trigo O'Connor d'Arlach. / Imagen: Juana Azurduy y su esposo Manuel Ascencio.
Juana Azurduy de Padilla, después de la muerte de su esposo
en el Villar donde ella había sido herida, decidió trasladarse a la villa de
San Bernardo de Tarija convencida de que las fuerzas que eran conducidas por el
caudillo Manuel Ascencio Padilla, habían perdido su original eficacia.
El 19 de noviembre de 1816, Uriondo le decía Güemes que acababa de recibir una comunicación
del comandante de Salinas, mediante el cual le hacía saber u había llegado a
ese lugar doña Juana Azurduy de Padilla
y le informaba que habían dispuesto que ella pase a la villa para que sea
recibida como merecía.
Después de su estadía
en Tarija donde compartió con los guerrilleros chapacos, la heroína decidió
radicarse en Salta, hizo el viaje a través de Oran y fue cálidamente recibida
por Miguel Martin de Güemes. En esa ciudad permaneció hasta el final de la
guerra por la emancipación. Retorno a su tierra natal después de la victoria de
Ayacucho.
Martin Pueyrredón,
director supremo de las Provincias Unidas del Rio de la Plata, el 13 de agosto
de 1816 había emitido un decreto a través del cual otorgaba a Juana Azurduy de
Padilla, el grado de Teniente Coronel.
La disposición destacaba que el gobierno
en justa recompensación de los heroicos sacrificios con que esta virtuosa
americana se presta en las rudas fatigas de la guerra en obsequio de la
libertad de la Patria, ha tenido a bien decorarla con el despacho de Teniente
Coronel.
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