Fuente: Ni con Lima ni con Buenos Aires: la formación de un
estado nacional en Charcas – De: José Luis Roca. // Imagen: Pendro Antonio de Olañeta y su esposa.
El retrato psicológico y el perfil político que nos ha
transmitido la historiografía tradicional, es el de un Pedro Antonio de Olañeta
muy desteñido, como para tirarlo al basurero de la historia. Sin embargo, una
lectura cuidadosa y atenta de los mismos documentos que se han usado para
denigrarlo (y el examen de otros menos conocidos), muestran una mejor imagen pública
suya. Fue el quien concibió un poderoso estado boliviano que incluía a Salta,
Jujuy, Tarapacá y Puno. Con sus armas ocupo ese extenso territorio despoblado
de toda sujeción tanto a España como a Buenos Aires o a Lima y abrió negociaciones
con Bolívar y Sucre a comienzos de 1825 para definir juntos el destino de
Charcas. Pero al final de ese proceso, Olañeta cometió el error fatal de
enfrentarse con el victorioso ejército colombiano y de haber aprestos para
continuar la guerra, no obstante los esfuerzos de los libertadores para que
hiciera causa común con ellos. Fue entonces cuando Sucre cruzo el Desaguadero dispuesto
a apoderarse de Charcas y, ante ese hecho, los amigos de Olañeta desertaron al
bando de los vencedores de Ayacucho, ocasionando su derrota y muerte en
Tumusla, en Abril de 1825. Si Olañeta no hubiese incurrido en tal error,
Bolivia hubiese nacido más fuerte y, al ser dueña de Tarapacá, su presencia en
el Pacifico hubiese sido mucho más sólida.
Parece dasiado grande está historieta de Olañeta, lo cierto es que ya para esa fecha 1825 ya no se le veía ni el flequillo aquí quebrada abajo (Jujuy y Salta)
ResponderEliminarBolivar convoca un congreso de bolivianos para decidir su pertenencia a Lima o Buenos Aires. Olañeta era absoluto defensor de la monarquía, pero su fuerza sin el auxilio del virreinato peruano se deshizo como un azucarillo.
ResponderEliminar